Maternidad (1901)
La imagen de la maternidad es una de las
más características de la época azul de Pablo Picasso (1901-1904): Esta
temática, tratada en diversos óleos, acuarelas y dibujos, le permitía al autor
representar en la figura de la mujer la vida, como la de este cuadro, aparecen
siempre volcadas amorosamente sobre sus hijos.
Aquí los tonos pastel acompañan la
imagen de arrullo e inclinación hacia el bebé mientras lo amamanta, con un
toque de melancolía. Predominan los colores pastel y tonos cálidos, de líneas
suaves y delicadas, y la figura de la madre, con proporciones alargadas,
recuerda la admiración de Picasso por El Greco.
El Guernica (1937)
El
cuadro recrea el horror vivido en la ciudad vasca de Guernica, tras sufrir un
bombardeo aéreo en plena guerra civil española. Es una de las obras más famosas
del pintor español y una de las más reconocidas a nivel mundial.
Dentro
de las figuras del cuadro se reproducen un total de seis personas y tres
animales, donde se distingue un brazo con una flor que se interpreta como una
luz de esperanza en medio de la desesperación. Cabezas cortadas, como
símbolo de muerte de personas inocentes, con el llamativo rasgo de poseer ojos
extremadamente abiertos, lo que puede ser por el asombro ante lo que estaba
sucediendo y el sinsentido.
Los tres músicos (1921)
Es un óleo sobre tela pintado, del cual hizo dos
versiones, que constituyen dos obras maestras de la historia del arte. Se
inscriben en la fase del denominado “cubismo sintético”, y suponen una especie
de despedida de este estilo.
Las obras están realizadas con la técnica del collage y combinan
fragmentos pegados y superficies pintadas sobre la tela. Durante
este periodo, Picasso, simplifica las formas hasta
convertirlas en elementos geométricos planos con los que juega. El
espectador percibe la síntesis de una mirada compleja (con múltiples
puntos de vista), además del concepto espacio y tiempo,
omnipresentes en todos los cuadros cubistas.
La vida (1903)
En ella se contraponen dos grandes temas conocidos. El de la pareja desnuda, de pie y enlazada, y el de la majestuosa maternidad pobre, cubierta con un manto y los pies desnudos. Dos personalidades tiernas y delicadas. Una relación que fue capaz de crear, en el hombre, un enamorado que le llevó al intento de asesinato y al suicidio, modelado por la pobreza, que aquí aparece como especie de retrato del dolor frente a la felicidad.
Las señoritas de Avignon (1907)
Está
hecho mediante la técnica del óleo sobre lienzo. Este cuadro, marcó el comienzo del Periodo
africano o Protocubismo, Imprime
un nuevo punto de partida donde elimina todo lo sublime de la tradición rompiendo
con el Realismo, los cánones de profundidad espacial y el ideal existente
hasta entonces del cuerpo femenino, reducida toda la obra a un conjunto de
planos angulares sin fondo ni perspectiva espacial, en el que las formas están
marcadas por líneas claro-oscuras.
Dos de
los rostros, los de aspecto más cubista, se
deben a la influencia del arte africano, mientras los dos centrales son más afines a las
caras de los frescos medievales y las primitivas esculturas ibéricas, el rostro de la izquierda presenta un perfil que recuerda
las pinturas egipcias. Las señoritas de avignon es una obra perteneciente a las
vanguardias pictóricas del siglo XX.
Retrato de Dora Maar (1937)
Engloba perfectamente
todo lo que le dio de sí la personalidad humana: es un cuadro de una belleza
misteriosa, de un estilo inconfundible que aúna el expresionismo inherente su
característica cubista, que retrata a una de las mujeres de Picasso, de las
muchas que amó y dejó de amar, de todas las que componen también un elemento
consustancial a su vida. Dora Maar fue una de sus amantes más incondicional y a
la que la relación con Picasso provocó un mayor grado de autodestrucción.
Arlequín acodado (1901)
Oleo
sobre lienzo, perteneciente a la época azul. Esta etapa fue previa al
cubismo, del que también fue precursor.
La
falta de libertad no solo son cadenas, también son esas miradas tristes y esa
soledad que se siente en al reflejar tus ojos. ¿Y quien dijo que no se siente
solo aunque haya mil asistentes en este circo?
Bañista sentada a la orilla del mar (1930)
Oleo sobre tela finamente detallado. La idea fue romper con la
profundidad espacial y la forma de representación ideal del desnudo
femenino, reestructurándolo por medio de líneas y planos cortantes y angulosos,
logrando así una ruptura con los modelos clásicos tradicionales.
Craneo de buey (1942)
En el cuadro, podemos ver una ventana
bordeando la pintura. Al exterior de esta ventana es la noche porque es negro,
oscuro. Y al interior hay una mesa con un cráneo de buey. Los elementos
del cuadro son compuestos por formas geométricas, pero el decorado es formado
por líneas verticales y horizontales y el cráneo se compone de formas
triangulares y redondas.
Picasso pintó este cuadro durante la segunda guerra mundial que le conmovió
profundamente, quiere mostrar que se encuentra en una situación de
espera entre la muerte y la vida, no existe realmente y está impotente frente a
la guerra.
Desayuno en la hierba (1932)
En su izquierda, una
mujer se mantiene alineada a lo largo del cuadro. Ambos miran la composición. Se
observa una modelo posando desnuda. La bañista
del fondo se ha alejado. Los personajes y la pintura han tomado el poder.
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